En cualquier ámbito de la vida social una primera impresión determina las relaciones y opiniones ante la nueva persona o situación ante la que nos encontramos. La primera impresión de tus nuevos empleados no es diferente. Un onboarding planificado no solo sirve para generar una bienvenida calurosa y afable a los empleados que recién pasan a formar parte de la plantilla, también favorece a la curva de aprendizaje, las relaciones laborales, la motivación extrínseca del trabajador y su percepción del entorno del trabajo y las tareas asignadas.