Los datos publicados ayer por el INE (Instituto Nacional de Empleo) reflejan un aumento de las personas con empleo en más de medio millón, concretamente 525.100 personas; y una caída del paro en 678.200 durante el año 2015. Un dato que podemos juzgar como positivo, aunque con la contrapartida de que aún hay 59.000 empleos menos que al comienzo de la legislatura, si seguimos indagando en los datos de la EPA (Encuesta Población Activa).
2015 cerró con un total de 18.094.200 ocupados, el nivel más alto desde el cuarto trimestre de 2011, por lo que la tasa de desempleo se sitúa en un 20,9%, prácticamente 3 puntos menos que en el año 2014 (23,7%). De estos datos se desprende que España ha creado empleo durante dos años consecutivos. Aunque la tasa de paro entre los más jóvenes continúa siendo muy elevada (46,25%), el desempleo entre los jóvenes de 16 a 35 años se redujo en 340.900 personas durante el pasado 2015.
Aunque se han creado puestos de trabajo en todos los sectores, los Servicios han sido los que más han tirado del empleo de nueva creación. La ocupación aumentó en 421.500 personas en Servicios; 50.800 en Agricultura; 28.100 en Construcción y 24.600 en Industria.
Los datos de la EPA muestran de manera preocupante la situación de los parados de larga duración (más de un año en paro): 2.328.700 personas; si bien es cierto que durante 2015 su numeró ascendió en 425.400 personas con respecto al año 2014.
Otro aspecto importante para tener en cuenta es la caída pronunciada de la población activa, que en 2015 se redujo en 153.200 personas. 566.600 personas abandonaron el mercado de trabajo en los últimos 4 años.
En cuanto a la tasa de temporalidad, se queda en un 25,66%. La mejora económica ha hecho posible que los primeros empleos en recuperarse sean los temporales, precisamente los que más se destruyeron durante la crisis.